La producción de cacao en Venezuela ha experimentado una significativa disminución debido a la expansión de la enfermedad conocida como Escoba de brujas, causada por el hongo Moniliophthora Roreri, según explicó Vicente Petit, directivo de la Asociación Nacional de Productores de Cacao de Venezuela.
En una entrevista con Unión Radio, Petit detalló que esta enfermedad fungosa no solo afecta una parte de la planta, sino que se extiende a todo el arbusto, incluidas las mazorcas que se desarrollan durante los meses de verano. A lo largo del invierno, las esporas del hongo se dispersan por toda la parcela, dificultando su control. “Eso causó muchos estragos tanto en Trinidad como en Brasil”, añadió.
Impacto en la producción de cacao en el país
El estado Sucre, tradicionalmente el mayor productor de cacao en Venezuela hasta hace dos años, solía generar alrededor de 10 millones de kilos de cacao. No obstante, en la actualidad, la producción ha caído a entre 5 y 6 millones de kilos, de acuerdo con Petit.
La Asociación de Productores en Sucre ha estado trabajando durante los últimos años en medidas preventivas para combatir esta enfermedad en los cultivos. “La Fundación Prosperi los está ayudando, así como la Alcaldía y la Gobernación, lograron un proceso para controlar la enfermedad, pero los recursos han sido pocos”, apuntó Petit.
“La Fundación Prosperi los está ayudando, así como la Alcaldía y la Gobernación, lograron un proceso para controlar la enfermedad, pero los recursos han sido pocos”
Vicente Petit
Además, señaló que en Barlovento, estado Miranda, el cacao también está siendo afectado por Escoba de brujas, lo que ha reducido la producción de aproximadamente 10 millones de kilos a solo 6 millones.
Llamado a la inversión en prevención
“Eso ha prendido las alarmas, porque debe invertirse en la prevención de una enfermedad que es recurrente cada año”, afirmó Petit, subrayando la necesidad de una mayor inversión en medidas preventivas.
Sin embargo, en medio de este escenario adverso, el sector ha experimentado un alivio en cuanto a los precios. “En los últimos meses subió de 3.000 dólares la tonelada a 11.000 dólares”, comentó Petit. Este incremento ha permitido a los productores adquirir fungicidas, herramientas de poda y productos para el control fitosanitario, con el objetivo de intentar recuperar parte de la producción afectada.
A pesar de estas mejoras, Petit destacó que la falta de asistencia técnica continúa siendo un obstáculo para los productores, quienes necesitan un mayor apoyo para enfrentar esta amenaza que pone en riesgo la industria cacaotera venezolana.